XVIII Conferencia Internacional sobre Bibliotecas Universitarias: Capacidades lectoras, informativas, digitales, transmedia y de investigación en la formación de los profesionales del futuro, realizada del 26 al 28 de octubre de 2021

*Las bibliotecas han transformado algunos de los servicios presenciales, al pasarlos al contexto digital, y han impartido programas a distancia para los usuarios lectores, entre otras acciones.

*El texto original ya no es una entidad cerrada, sino que puede ser penetrada por distintas personas y autores que lo han convertido en una entidad plástica, abierta e ilimitadamente modificable.

*Los sistemas educativos siguen enfocados en la adquisición de conocimientos, menos que en el pensamiento crítico, lo cual resulta problemático porque la alfabetización informacional se enfoca de manera puntual en el pensamiento crítico.

* Los estudiantes han adquirido una serie de alfabetizaciones a lo largo de su vida, y cuando entran en el campo de la alfabetización mediática se pretende que desarrollen la comprensión razonada y crítica de la naturaleza de los medios de comunicación de masas, que conozcan las técnicas que utilizan y los efectos que estas técnicas producen.

Ya puedes consultar aquí el número más reciente de nuestra Revista Biblioteca Universitaria Volumen 24, número 2 (julio-diciembre 2021).

Ya puedes consultar aquí el número más reciente de nuestra Revista Biblioteca Universitaria Volumen 24, número 2  (julio-diciembre 2021).

IV Foro Virtual Agenda 2030: La contribución de las bibliotecas al Desarrollo Sostenible

*Básicamente, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 buscan la erradicación de la pobreza, la desigualdad social, frenar el cambio climático, garantizar la paz y la prosperidad de la sociedad, y se han caracterizado por su naturaleza incluyente.

*El apoyo de las bibliotecas en el desarrollo sostenible debe ser a largo plazo y se debe incluir a todos los sectores de la población.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estableció el día 25 de noviembre para visibilizar, prevenir y eliminar la violencia contra las mujeres y niñas, a partir de las siguientes consideraciones:

La violencia en contra de las mujeres impide el desarrollo y la paz de las sociedades. Se trata de una violencia estructural –física, sexual y psicológica- que se ha presentado desde tiempos ancestrales en los ámbitos domésticos, familiares y públicos, particularmente en las esferas estatales, educativas, culturales, políticas, económicas y sociales en amplios sectores en todo el mundo. Asimismo, es resultado de relaciones de poder desiguales y discriminatorias que subordinan y someten a millones de mujeres y niñas en el planeta, especialmente de grupos vulnerables.

*A pesar de que fueron cerradas las puertas de las bibliotecas para evitar la propagación del contagio de la COVID-19, sus servicios nunca fueron interrumpidos gracias al desarrollo de la tecnología.

Los disturbios de Stonewall del 28 de junio de 1969, son considerados como el símbolo de la lucha por los derechos de la comunidad LGBTI+, suceso que visibilizó una historia de desigualdad que ha permitido impulsar algunos cambios legislativos y ha abierto la posibilidad de sensibilizar y concientizar a la sociedad sobre este tema dando a conocer los informes que organizaciones como a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos han realizado en torno a la Violencia contra Personas Lesbianas, Gay, Bisexuales, Trans e Intersex en América, que en el 2015 destaca que “existe una amplia discriminación e intolerancia respecto de orientaciones sexuales, identidades de género diversas y personas cuyos cuerpos desafían las corporalidades aceptadas socialmente”; y que los Estados, “a través de su acción u omisión, generan esta discriminación e intolerancia, y en algunas instancias las refuerzan”.[1]